Raúl Jiménez, entrenador

Raúl Jiménez es entrenador de baloncesto. Tres simples palabras, pero si intentamos resumir brevemente todo lo que implican, es casi una misión imposible. Si miramos su currículum veremos que es Licenciado en Ciencias de la Actividad Física y el Deporte. Entrenador Nacional de Musculación y Fisioculturismo, Entrenador Superior de Baloncesto y que ha entrenado como Entrenador Ayudante en EBA, LEB2, LEB y como Entrenador Jefe en 1ª, EBA, LEB2 y LEB Bronce. Además de todo esto, ha sacado tiempo para colaborar en diversas webs tanto españolas como extranjeras (entre ellas, Solobasket), mantener un interesantísimo blog y escribir un libro “¡Defiende!” en el que trata diferentes formas de defensa ante distintas situaciones de ataque. 

Con ese bagaje a cuestas, la temporada 2011/2012 se hizo cargo del Factum Sport Debrécen, por entonces colista de la liga húngara, consiguiendo llevarle a un paso de los playoffs y en la 2012/2013 decidió emprender su aventura particular en Eslovaquia, al frente del Prievidza, de nuevo colista en la competición. Tras hacerse cargo del equipo con un 0-3, consiguió colar al equipo en la Copa de Eslovaquia y hacerse con la cuarta plaza, así que su cese nos sorprendió a más de uno. Como curiosidad, Prievidza ha acabado la competición en 6ª posición en una liga de 9 equipos. 

Con todo lo que os acabo de explicar, comprenderéis por qué fue la primera persona en quien pensé cuando decidí embarcarme en esta nueva aventura como “juntaletras”, porque con este artículo, me gustaría que todos pudiéramos aprender acerca de la profesión de entrenador. Tener a alguien tan amable y tan colaborador al otro lado y que no dudó un segundo en contestar mis interminables preguntas, ayuda muchísimo. Que además sea un apasionado del baloncesto, ayuda muchísimo más. Así que os transcribo nuestra conversación.

 - Durante estos dos últimos años has estado trabajando en ligas tan poco conocidas como la húngara y la extraliga eslovaca. ¿Cuáles son las principales diferencias con las ligas españolas? Hay algo que hayas encontrado en el extranjero que crees que pudiéramos "adoptar" para mejorar nuestras competiciones? 

  No hay diferencias demasiado llamativas, los niveles pueden variar, pero si hablamos de organización, por supuesto estando en un escalón distinto que nuestra ACB, son ligas por lo general serias y en las que se puede trabajar a gusto. Por ejemplo el servicio de vídeo para que los entrenadores tengan a disposición los partidos en la liga húngara utiliza el mismo sistema que la A1 italiana... Es decir, no hablamos de ligas desorganizadas o ancladas en el pasado. Hay pequeñas peculiaridades pero seguro que va a haber una evolución. Por ejemplo en Eslovaquia, son en general "impacientes" al respecto de la adaptación de los jugadores extranjeros, debido a que por normativa se pueden tener hasta ocho jugadores de fuera y es sencillo cambiar... En Hungría hay una liga sub 20 que se juega paralela a la competición profesional, con las mismas jornadas, los mismos equipos, y creo que es muy buena para los jugadores jóvenes. Probablemente no se podría extrapolar exactamente igual a España, pero desde luego a los jóvenes húngaros les ayuda. 

- Solemos hablar de la ACB como la segunda mejor liga del mundo. ¿En qué puesto crees que deberían estar Leb Oro, Plata y EBA? 

  Es complicado y creo que no debemos obsesionarnos, algo que quizá hemos hecho en años anteriores, con la posición que ocupan nuestras ligas en una hipotética clasificación. Qué más da si es la sexta o la séptima mejor, lo importante es que sea competitiva, que tenga sus objetivos claros y los cumpla. Que la gente vaya a verla a las canchas, se identifique con sus equipos... A partir de ahí se crece. Ahora está claro, por ejemplo, que el baloncesto alemán está en alza, bien, hagamos crecer el nuestro otra vez. 

- Siempre dices que desde muy joven descubriste tu pasión por entrenar y no te planteaste siquiera jugar. Los niños suelen soñar con ser un Kobe Bryant, un Gasol, un Lebron James, no un Obradovic o un Ivkovic. ¿Por qué tú no? Quiero decir, ¿qué es lo que te apasiona y qué te llevó a hacerte entrenador? 

  En primer lugar no todos valemos para jugar a un nivel "serio". No es un drama, probablemente tampoco ganaré nunca el maratón de Boston, ni podré cocinar codo con codo con Ferrán Adriá o ser astronauta. En aquel momento no hubo nada específico que me llevara a entrenar, un buen día me propusieron ayudar con un grupo de niñas y empecé a hacerlo. A partir de ahí te va enganchando. Llega un momento en el que tienes que empezar a sacrificar otras cosas, pero si te satisface... Lo digo siempre, a mi me gusta cada minuto que dedico a esto, en la cancha, en la oficina, preparando un entrenamiento, viendo vídeo... Me parece el mejor trabajo del mundo. 

 - ¿Qué opinas de la situación del baloncesto en España? ¿Crees que la crisis es solo económica, o hay algo más de fondo? ¿Qué crees que podríamos hacer para mejorarla (tanto profesionales como simples aficionados)? 

  Me parece que, por decirlo así, el mercado se está autorregulando. Ahora hay menos dinero por lo que se reducen los puestos para profesionales. Seguro que se puede mejorar la gestión de los clubes, la venta de nuestro "producto", el propio "producto" y a sus protagonistas. Desde la formación de los jugadores jóvenes, pasando por la de los entrenadores, hasta los gestores del baloncesto. Hay margen de mejora. Por ser mi colectivo creo que puedo ser más crítico con los entrenadores, y es algo que en los cursos de entrenadores repito muchas veces, a mi ya no me vale el "es que todo el mundo lo hace así" (por ejemplo con la eterna discusión entre formar y competir, pero se puede aplicar a más cosas) No es cierto que todo el mundo trabaje igual, y desde luego no es cierto que todo el mundo lo haga mal. Tú decides cómo quieres comportarte y cómo quieres entrenar. Como en casi todo, lo que hay que hacer es pensar en los problemas, escuchar a los demás, ponerte en el lugar de los otros... y actuar con el mayor número posible de elementos de juicio. Ser constructivo y no ver sólo lo malo, sin dejar de intentar mejorarlo, claro. 

 - Para ti, ¿qué es ser entrenador? ¿Cómo debe trabajar? 

  Es pensar siempre en lo que es mejor para tu equipo. Trabajar de manera disciplinada pero también ser flexible. Entender que el error es parte de nuestro deporte y estar preparado para afrontarlo. Ser lo más justo posible, entendiendo que hay muchos puntos de vista y que no se puede contentar a todos. Pero sobre todo disfrutar con este trabajo. Tener claras las razones por las que te dedicas a ello. 

 - Descríbeme un día normal de trabajo. 

  Esta temporada, por ejemplo, despertar a las 6 a.m. trabajar un poco en casa antes de ir sobre las 8 a la oficina, entrenábamos a las 9:30 o 10:00 según los días, hasta las 12 aproximadamente. Después ír a comer, y vuelta la oficina, hasta la hora de entrenar a la tarde, normalmente a las 17:30h. Acabado el entrenamiento algún pequeño repaso al día y a lo que venía al día siguiente pero por lo general ya estaba todo hecho, es lo que tiene esa jornada continua, y era el momento de marchar a casa. 

 - Son muchas horas, ¿cómo se organiza el "contenido" de esas horas durante la semana? 

  Para ser más específico, si jugábamos el sábado, el domingo por la mañana teníamos una sesión "regenerativa" para mejorar la recuperación de los jugadores. Este mismo día vuelvo a ver el último partido y hago un análisis minucioso, preparando en caso de considerarlo necesario un vídeo para mostrar a los jugadores el lunes. También es el día en el que organizo la semana siguiente, apoyándome en el informe de scouting de nuestro siguiente rival, en una planificación más global de mi equipo, y en alguna cuestión que pueda haber surgido del último partido que hemos jugado. Me gusta tener listos los entrenamientos de la primera mitad de la semana el domingo por la tarde. Está claro que todo tiene un nivel de flexibilidad y hay cosas que pueden variar según avanza la semana, pero de manera general a mi me gusta así. Los entrenamientos de la segunda mitad los voy preparando durante lunes y martes. En los últimos equipos en los que he entrenado he realizado, tanto siendo primer entrenador como ayudante, un trabajo individual con jugadores jóvenes y algunos no tan jóvenes que o bien querían o consideraba que necesitaban un entrenamiento extra. Antes de los entrenamientos de la mañana es el mejor momento para ello. Estos entrenamientos los planifico de manera mensual. Normalmente empiezo a trabajar nuestro rival al principio de la semana, si bien no de manera muy explícita, pero los primeros entrenamientos ya incluyen algunas rutinas para ir preparándonos. Por supuesto el énfasis principal, si no hay partido entre semana, durante lunes y martes, lo pongo en mi equipo, avanzar o repasar contenidos tácticos etc. El miércoles puede ir hacia un lado u otro, jueves y viernes van más enfocados a preparar de manera específica el partido. Sistemas que más utiliza el rival, posibles variantes defensivas, cómo podemos utilizar nuestro ataque para hacerles daño... Durante los tres primeros días realizo, si considero necesario, alguna reunión individual o por puestos, que preparo el lunes por la mañana con los jugadores, para tratar temas del partido anterior. Las reuniones colectivas, con todo el equipo creo que debes utilizarlas en ocasiones muy contadas, ya que los mensajes no llegan con tanta claridad y puede tenderse a diluir las responsabilidades. A nivel de scouting suelo hacer dos sesiones "informativas" sobre los rivales, jueves y viernes. Además los jugadores tienen a disposición vídeos individuales de los jugadores del otro equipo, y si lo piden, partidos completos, que subimos a la "nube" para que puedan acceder a ellos. Quién sabe si alguno se puede aburrir de ver NBA a las tantas de la noche y de repente ponerse a ver a los rivales ese fin de semana... Durante esta segunda mitad de la semana me gusta supervisar, sin profundizar mucho, el trabajo de scouting de la semana siguiente, en general los ayudantes están trabajando sobre ello pero en caso de que haya algún problema. El informe debe estar preparado, como he dicho antes, para que justo al acabar el partido de la semana actual, yo pueda trabajar sobre ello. Según avanza la temporada el número de sesiones semanales puede variar, así como la duración y la intensidad. Aunque siempre intentas, acorde también a tus medios, tener cuanta más información posible del estado físico de tus jugadores, a veces, el "arte" de entrenar es saber cuando modificar sobre la marcha, eliminando entrenamientos, ¡o sumándolos! Me gusta entrenar dos sesiones el día antes de partido y hacer una muy suave el día de partido por la mañana, un repaso, sin vendajes, sin contacto, del plan de partido, un poco de tiro... Normalmente hago mini - reuniones con mis ayudantes cada día, para hablar de los entrenamientos, recibir información, propuestas, ideas... 

- ¿Pero es que nunca descansas? 

  Jajaja, vamos a ver, el tiempo de "descanso", en mi caso, llega la tarde - noche tras el último entrenamiento del día anterior al partido, y luego la noche posterior al partido, que solía ser terrible pero una persona muy importante para mi me enseñó a desconectar. Además, la mañana siguiente al partido madrugo para salir a correr, es una rutina que me va muy bien. 

- Si yo te digo Prievidza, ¿qué es lo primero que pasa por tu mente? 

  Una gran experiencia. Hemos jugado buen baloncesto y he tenido un grupo de jugadores que trabajaba bien. Algunos de esos que fichas más adelante si tienes oportunidad. Al final a todo el mundo le extraña como ha terminado, pero es mejor no darle vueltas. A veces no conectas con gente que tiene capacidad para forzar este tipo de decisiones y ya está. El equipo iba último al llegar y en dos meses nos pusimos cuartos para el corte de la copa. Estábamos para conseguir el factor campo en la primera ronda de playoff. La liga me elige para el banquillo de los extranjeros en el All Star. Repito, pocas cosas negativas y muchas para disfrutar. 

- Entre tú y yo, ¿crees que se reconoce el papel del entrenador? ¿Alguna vez has tenido la sensación de que la figura del entrenador es una especie de cabeza de turco que acaba pagando por otro tipo de problemas?

  ¿Cabeza de turco? Jamás he tenido esa sensación. Eso no ha ocurrido nunca en la historia del deporte. Ahora en serio, tenemos que asumir nuestra responsabilidad en el funcionamiento de nuestros equipos. Y tenemos que entender que hay factores que influirán pero probablemente no podremos controlar, al final estás trabajando con personas, no con robots. Hay que intentar ser lo mejor posible en todos los aspectos pero no volverse loco con los que no están a tu alcance. Y al final, te das cuenta de que la mejor valoración de tu trabajo la vas a hacer tu mismo. Seguro que en ocasiones no parecerá justo, pero incluso en esos momentos si te puedes ir a casa y dormir tranquilo, te sirve. 

- En las redes sociales, estamos asistiendo al "trolleo" de ciertos entrenadores, apoyándose en tics y comportamientos un tanto peculiares. ¿Crees que eso ayuda a que la gente, en general, os esté "humanizando"?

  Creo que sería bueno que hubiese otro nivel de humanización, en lo que respecta a conocer un poco más nuestro trabajo. Supongo que todos debemos poner de nuestra parte para eso. Y claro, hay una parte de nuestro trabajo que se hace de cara al público por lo que es normal que surjan esos "avatares". Hubo viñetas de humore, guiñoles, ahora han evolucionado a "fakes" 

- El colectivo de entrenadores no parece ser de los más corporativistas, quizás porque el trabajo de uno implique que otro se quede sin él. ¿Echas de menos algún tipo de "protección"? 

  Hace unos días explicaba en una charla en el INEF de Madrid que en otros países cuesta escuchar a un entrenador hablar mal de otro de su misma nacionalidad. Creo que nadie va a venir a resolver nuestros problemas. Debemos hacerlo nosotros mismos. Cuando sales fuera de España tomas más conciencia aún de lo importantes que podemos ser unos para otros en este trabajo. ¿Protección? no creo que debamos tener más o menos que en cualquier otro empleo. 

- Cuando se habla de entrenadores, la gente suele pensar en los más mediáticos, los seleccionadores, los de equipos punteros en las ligas europeas/NBA, los de equipos de Euroleague, pero no tiene en cuenta que esos son una minoría si tenemos en cuenta simplemente en España las competiciones FEB. Tú las has trabajado todas, así que eres un gran conocedor de estas. ¿Cómo vive un entrenador "normal"? ¿Cuál suele ser su sueldo? ¿Está regulado por algún colectivo? ¿Hay pluses por partidos ganados o por competiciones ganadas? 

  En esas ligas he vivido como muchos otros trabajadores, con la suerte de que es un trabajo que me apasiona, que a veces parece que haya que pedir perdón por eso, lo cual no entiendo. Cobrando, a veces al día y a veces no, un sueldo normal. Sobre los pluses que me comentas es algo que varía de unos casos a otros. En ocasiones se acuerdan por objetivos. En Hungría al ser la situación complicada cuando negociamos el fichaje me propusieron un bonus por conseguir salvar la categoría, por ejemplo. En Eslovaquia era por estar en el Top 4 de la liga... Son situaciones particulares de cada contrato. No hay ningún convenio que regule unos mínimos en categorías FEB. A mi también me sorprende. Creo que los culpables de ello somos los propios entrenadores. 

- La pizarra, esa gran...

  Ya se por dónde va la pregunta... La pizarra debe ser una ayuda para que el jugador pueda hacer "lo suyo". Puedes llamarlo conseguir coordinarse con otros cuatro compañeros, jugar en equipo, desarrollar su talento... o a veces darle opciones por la escasez de ese talento. Ni es la panacea ni es el demonio como parece que a veces se quiere hacer ver. Hay buenos usos y malos usos. Los buenos hay que potenciarlos, los malos, intentar corregirlos educando a los entrenadores. 

- ¿La estructura de las competiciones FEB funciona? ¿Cómo las restructurarías teniendo en cuenta todos los factores (económicos, profesionales...)? 

  Como he dicho antes creo que el baloncesto se autorregula. Pero yo no tengo todos los elementos de juicio. Desde mi punto de vista debería haber tantas ligas profesionales como las condiciones económicas permitan. Todos queremos "estar", pero a nadie le gusta que le prometan algo que luego no se cumple. Entonces si tenemos dinero para cien profesionales, tengamos esos cien, y trabajemos para que en el futuro sean doscientos. Hay gente con un conocimiento más global mayor que el mío que seguro piensa mucho en cómo mejorar el sistema. Yo como entrenador debo hacer mi trabajo y ayudar en lo que pueda a los que me rodean, y eso intento hacer en cada organización en la que trabajo. 

- Un entrenador 

  Con el tiempo te das cuenta de que no se trata de que te fijes más en uno u otro, yo disfruto viendo a aquellos que se apasionan haciendo su trabajo, que le ponen horas, que piensan en sus equipos, en cómo hacerlo siempre un poco mejor. No si entrena al CSKA o a un equipo alevín. El mejor con el que yo he trabajado es Paco García. 

- Un jugador 

  Mario Bruno Fernández. Un jugador del que he aprendido no sólo mientras le entrené sino mucho tiempo después. Disciplina, esfuerzo, pasión, honradez, generosidad... 

- Una liga 

  La verdad es que he disfrutado en todas las que he trabajado, desde formación, pasando por primera nacional hasta primeras divisiones europeas.

 - ¿Cuál ha sido tu mejor partido?

  No lo se. Sinceramente. Recuerdo partidos especiales. Siempre se dice que lo mejor está por llegar. Recuerdo debuts, recuerdo victorias importantes, recuerdo derrotas dolorosas, momentos en que cumples los objetivos del equipo... Todos son valiosos. 

- ¿Qué estás haciendo ahora, mientras esperas un nuevo destino? ¿Dónde te gustaría entrenar? 

  Veo con mucho detenimiento las ligas en las que he entrenado los dos últimos años. Sigo atentamente las ligas españolas, estoy viendo dos eliminatorias de la NBA (Las de Bulls y Celtics porque el día solo tiene 24 horas y de momento hay que priorizar, no se puede ver todo) y esperando a tener disponibles playoff de la LNB argentina, que también intento no dejar de lado. Tengo que sacar tiempo para algunos partidos pendientes de la liga Adriática. He visto partidos de categoría junior de Madrid. Pronto empiezan los Campeonatos de España, que iré a ver. He dado alguna charla y trabajado en el desarrollo de una app para entrenadores... Es decir, estudiar, ver, preparar... estar listo para empezar de nuevo en cuanto sea posible. Me gustaría entrenar allí donde haya un buen "plan". Entrenador jefe o ayudante, España o fuera... 

- ¿Qué hace un entrenador en su tiempo libre? Recomiéndame un libro, una película y una serie y dime el por qué. 

  Si por tiempo libre entendemos aquel al margen del baloncesto... me gusta mucho leer, muy variado además. Y hace algún tiempo empecé a correr. Hay muchos libros que recomendaría, te digo tres muy diferentes, Invictus, de John Carlin, la historia de Nelson Mandela es muy inspiradora. Gang Leader for a day, de Sudhir Venkatesh, que habla de toda la impresionante organización que conlleva una banda de delincuentes callejeros en Chicago. Einstein, de Walter Isaacson, una biografía de ese genio de la ciencia. Hace poco me recomendaron una película que me gustó, "La Ola" sobre un experimento educativo que se hizo en un instituto americano en los 70, aunque la película está ambientada en la Alemania de la actualidad. Una serie, The Wire, aunque se que soy poco original, y no creo que descubra nada a los aficionados a las series... 

- ¿Una canción? 

  No soy muy de música, pero por ejemplo "When the world is running down you make the best of what's still around" de The Police 

- Un sueño 

  Ir a la luna 

 Si aplicamos la fórmula Trabajo = Éxito, estoy muy segura de que continuaremos oyendo hablar sobre Raúl durante mucho tiempo y que un día no muy lejano podremos verle en uno de esos equipos de élite de los cuales habla todo el mundo… En cuanto a viajar a la luna… creo que en eso no podemos ayudarle, pero ¿quién sabe? Por supuesto, os recomiendo a todos que sigáis su cuenta de twitter @rjmbasket08